jueves, 27 de septiembre de 2012

Joint Security Area (2000)

No es nueva, pero era la siguiente de mi lista de cine koreano en el que estoy profundizando. He querido seguir revisando la filmografía de Chan Wook Park ("Oldboy" (2003), "Thirst" (2009)).
En la frontera entre las dos Koreas existe lo que se llama el "área de seguridad compartida", totalmente militarizada, en la que se produce un incidente que deriva en un conflicto entre ambos países. Unos soldados aparecen muertos por disparos en el puesto fronterizo de Korea del Norte, en un episodio que involucró a un soldado de Korea del Sur. Como la tensión política entre ambos países crece por momentos se encarga la investigación a una comisión de naciones neutrales, compuesta por Suiza y Suecia. Una militar suiza de padre koreano, la Mayor Jean, se encarga de la misma.
En principio, el soldado de Korea del Sur, el Sargento Lee interpretado por Byung hun Lee ("I saw the devil", 2010) está en shock y no declara, aunque la versión del Sur es que fue raptado y él se liberó matando a sus captores. Pero en el Norte tienen un testigo, un soldado que quedó vivo tras el tiroteo. El soldado es el Sargento Oh, interpretado por Kang-ho Song ("Memories of murder" (2003), "The host" (2006), "Thirst" (2009)). La Mayor Jean tendrá que aclarar el suceso, partiendo de que nadie quiere colaborar con ella.
La Mayor Jean tendrá que apañárselas para desentrañar lo que ocurrió en realidad, aunque en el fondo ninguna de las dos potencias quiere que se aclare nada ya que se pretende mantener la paz a toda costa entre dos regímenes tan opuestos: el comunista y dictatorial de Korea del Norte, uno de los países, si no el que más, más cerrados del mundo; y el capitalista y abierto al mundo (relaciones con EEUU) de Korea del Sur, lo que cualquier occidental calificaría de preferible, aunque en un momento de la película en el Norte se hace gala de su confianza en su país y su sistema. Tras leer el excelente comic de Guy Delisle, Pyongyang, se podría dudar entre si los norkoreanos realmente se lo creen o solo es una necesaria fachada.
No cuento más porque realmente merece la pena descubrirla. Para mí ha sido una gozada. Lo que sí puedo decir es que la historia es muy interesante y entretenida, pero también emotiva incluso divertida por momentos.  
Desde luego, el argumento es algo que podría ocurrir de verdad, si es que no ha ocurrido algo análogo alguna vez en una situación como esta entre dos países enfrentados por la guerra, divididos en dos. Muy acertado el inesperado desenlace, que al final de la película se matiza para dar un sentido no obvio a la historia, que hace que tenga todo mi crédito.

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